Pero si esas «dulzuras» son solamente dulces para nosotros, si nos van haciendo curiosos, amargos, insoportables, impacientes, tercos, orgullosos, presuntuosos, duros para con los hermanos; si, al creernos santitos rechazamos todo consejo y advertencia… entonces, esas consolaciones indudablemente son falsas y malas, porque un árbol bueno sólo produce frutos buenos.
junio 2016
Mt 7, 6. 12-14 – Discurso evangélico: No profanar las cosas santas. La Regla de Oro. Los dos caminos
Acomodémonos, de buena gana, con los más achacosos y os aseguro que no por ello llegaremos más tarde a la perfección, al contrario, eso mismo será lo que nos conduzca a ella más aprisa, pues al no tener mucho que hacer, lo haremos más perfectamente. Y así es como nuestras obras agradan más a Dios, pues Él no tiene en cuenta la multiplicidad de cosas que hacemos por su amor, sino solamente el fervor de la caridad con que las hacemos.
Mt 7, 1-5 – Discurso evangélico: No juzgar
Al que te habla mal de su prójimo, respóndele: «¡Párate, hermano! Yo mismo caigo cada día en faltas más graves; siendo así, ¿cómo podré condenar a éste?» Así sacarás un doble provecho: te curarás a ti mismo y curarás a tu prójimo. No juzgar es un atajo que lleva al perdón de los pecados si es verdadera esta palabra: «No juzguéis y no seréis juzgados»… Algunos han cometido graves faltas a la vista de todos, pero en secreto han hecho grandes actos de virtud. Así es que sus detractores se han equivocado pues no han sabido ver más que la humareda y no han visto al sol…
María Magdalena será celebrada como fiesta litúrgicamente
Después de la Madre del Señor, María Magdalena es sin duda la segunda mujer más importante en la historia de la salvación: Por un lado, tiene el honor de ser la primera testigo (“prima testis”) de la resurrección del Señor, la primera que ve el sepulcro vacío y la primera en escuchar la verdad de su resurrección. Y es la primera en anunciarlo a los apóstoles. Por eso Santo Tomás de Aquino le dio el título de «apóstol de los apóstoles». Por eso, es justo que la celebración litúrgica de esta mujer adquiera el mismo grado de fiesta dado a la celebración de los apóstoles en el Calendario Romano General.
Mt 5, 38-42 – Discurso evangélico: No resistáis al mal
En todas las cosas Cristo te invita a ser útil a tu prójimo, no teniendo en cuenta su maldad, sino poniendo tu bondad al máximo. De esta manera nos invita a hacernos semejantes a nuestro Padre «que hace salir el sol sobre malos y buenos, y manda la lluvia a justos e injustos».
San Antonio de Padua, presbítero. Memoria obligatoria (13 de Junio) – Homilías
Memoria de san Antonio, presbítero y doctor de la Iglesia, que, nacido en Portugal, primero fue canónigo regular y después entró en la Orden recién fundada de los Hermanos Menores, para propagar la fe entre los pueblos de África, pero se dedicó a predicar por Italia y Francia, donde atrajo a muchos a la verdadera fe. Escribió sermones notables por su doctrina y estilo, y por mandato de san Francisco enseñó teología a los hermanos, hasta que en Padua descansó en el Señor. (+ 1231)
Domingo XIII Tiempo Ordinario (C) – Homilías
El seguimiento de Cristo no es una cuestión de negociaciones. Poner condiciones es estar diciendo «no», es ya dejar de seguirle. Cristo lo ha dado todo y lo pide todo. Y esto es lo que implica ser cristiano: un seguimiento incondicional. No hay dos tipos de cristianos. Sólo es verdaderamente cristiano el que «va a por todas». Cristo comprende la debilidad humana y los fallos motivados por ella, pero no acepta la mediocridad por sistema, el «bajar el listón», los cálculos egoístas. Los apóstoles fueron grandes pecadores: san Pedro llegó a negar a Cristo, san Pablo persiguió a la Iglesia… Pero no fueron mediocres: se dieron del todo, gastaron su vida por Cristo, sin reservarse nada.
Sábado XI Tiempo Ordinario (Par) – Homilías
El Pueblo de Dios y cada uno de sus miembros es consciente de que en esta vida le quedan duras etapas que recorrer bajo la incomprensión, injuria y persecución. Pero nuestra esperanza es firme, pues está puesta en Cristo, que dijo: «si a mí me persiguieron, también os perseguirán a vosotros»
Viernes XI Tiempo Ordinario (Par) – Homilías
Toda la historia de Israel es la historia de los pactos entre Dios y su pueblo. El pueblo rompe la alianza por su rebeldía e infidelidad y los reanuda la infinita misericordia de Dios. Esto también nos atañe a nosotros. Es cierto que el Pacto hecho con Cristo y sellado con su preciosísima Sangre no puede romperse jamás. Pero nosotros podemos apartarnos de él por nuestros muchos pecados.
Jueves XI Tiempo Ordinario (Par) – Homilías
Este fuego es saludable y útil, por el cual nosotros, que estábamos fríos y muertos por el pecado y por la ignorancia del verdadero Dios, somos despiertos para la vida religiosa, y nos hacemos fervorosos en el espíritu, según dice San Pablo (Rom 12,11); y conseguimos además la participación del Espíritu, a manera de fuego dentro de nosotros. Fuimos bautizados en el fuego, en el Espíritu Santo. Es habitual en la Sagrada Escritura llamar con el nombre de fuego a la enseñanza divina y a la fuerza y actuación del Espíritu Santo.