La memoria del Corazón Inmaculado de la Bienaventurada Virgen María, acariciando en su corazón la memoria de los misterios de la salvación realizados en su Hijo, ella esperaba con confianza el cumplimiento en Cristo.
mayo 2016
Sagrado Corazón de Jesús (C) – Homilías
Solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús, el cual, manso y humilde de corazón, exaltado sobre la cruz, es fuente de vida y de amor, de la que se saciarán todos los pueblos.
Visitación de la Virgen María, fiesta (31 de Mayo) – Homilías
Fiesta de la Visitación de la bienaventurada Virgen María, cuando fue a ver su prima Isabel, que estaba embarazada de un hijo en su ancianidad, y la saludó. Al encontrarse con alegría las dos futuras madres, el Redentor que venía al mundo santificó a su precursor que aún estaba en el seno de Isabel, y al responder María al saludo de Isabel, y exultando de gozo en el Espíritu santo, glorificó a Dios con el cántico de alabanza del Magnificat.
Sábado IX Tiempo Ordinario (Par) – Homilías
El oro que piensas prestar, dámelo a Mí, que te pagaré con mayor rédito y más seguro. El cuerpo que piensas alistar a la milicia de otro, alístalo a la mía, porque yo soy superior a todos en la retribución»… «Su amor es grande. Si deseas prestarle, Él está dispuesto. Si quieres sembrar, Él vende la semilla; si construir, Él está diciendo: «edifica en mis solares». ¿Por qué corres tras los hombres, que nada pueden? Corre en pos de Dios que, por cosas pequeñas, te da otras que son grandes»
Viernes IX Tiempo Ordinario (Par) – Homilías
El Verbo divino, «aunque hizo suya nuestra misma debilidad, no por esto se hizo partícipe de nuestros pecados. Tomó la condición de esclavo, pero libre de la malicia del pecado, ennobleciendo nuestra humanidad sin mermar su divinidad, porque aquel anonadamiento suyo fue una dignación de su misericordia, no una falta de poder. Por tanto, el mismo que, permaneciendo en su condición divina, hizo al hombre, es el mismo que se hace hombre, tomando la condición de esclavo»
Jueves IX Tiempo Ordinario (Par) – Homilías
Jesús responde a una consulta que le hacen, y afirma la primacía de la ley del amor a Dios y al prójimo. El cumplimiento de estos mandatos supera todas las prácticas externas de religión. Este amor a Dios y al prójimo es el impulso fundamental de la vida cristiana.
Miércoles IX Tiempo Ordinario (Par) – Homilías
«Dios no es Dios de muertos, sino de vivos». No es Dios de quienes no existen, de quienes absolutamente han desaparecido y que no han de levantarse más. Porque no dijo: «Yo era», sino: «Yo soy», es Dios de quienes existen y viven.
Martes IX Tiempo Ordinario (Par) – Homilías
Declarando que es necesario «dar al César lo que es del César», libra a los espíritus consagrados a Dios de toda preocupación y deber humano. En efecto, si nada de lo que pertenece al César se retiene en nuestras manos, nosotros no quedamos ligados por la obligación de devolverle las cosas que son suyas. Si, por el contrario, nos dedicamos a sus cosas y nos sometemos al cuidado del patrimonio ajeno, no es injusticia devolver al César lo que es del César, y tener que dar a Dios las cosas que son suyas: el cuerpo, el alma, la voluntad.
Lunes IX Tiempo Ordinario (Par) – Homilías
Fue Dios quien plantó la viña del género humano, cuando creó a Adán y cuando eligió a los patriarcas. Después la confió a los viñadores por medio de la legislación de Moisés. La rodeó con un seto, es decir, delimitó la tierra que tenían que cultivar. Edificó una torre, es decir, eligió a Jerusalén. Cavó un lagar, cuando preparó el receptáculo de la palabra profética; y así envió profetas antes del exilio en Babilonia, y otros después del exilio, más numerosos que los primeros, para recabar los frutos.
Lc 2, 41-51 – El corazón de María
Esta Reina de las vírgenes es también Reina de los mártires. Pero una vez más fue en su corazón donde la espada la traspasó (Lc 2, 35), porque en ella todo se realiza por dentro… ¡Oh!, qué hermoso es contemplarla durante su largo martirio, tan serena, envuelta en una especie de majestad que manifiesta juntamente la fortaleza y la dulzura…